Le gusta besar, es sumisa y ruda, ríe y mucho, dice groserías, canta, le gusta los collares, no conoce la nieve y llora para ser abrazada, su piel es canela, viaja en bus, carga paquetes pesados, es la primera que se levanta, trabaja ocho horas diarias y llega a casa para cocinar a su esposo.
Era delgada, embarazó y sus curvas se arreciaron.
La miro…, y de seguro en venganza por mi mutismo durante todos estos años, ella sutil e infamemente, cuando camina, baila o simplemente cuando se le antoja, mueve sus caderas.
Me acerco a sus lácteas ubres mientras amamanta…, huelen a monte húmedo y vainilla.
Llega la noche, mi cama incómoda, hay una especie de tibieza contenida en mi bragueta, aprieto…, en el cuarto varios son los que roncan, me levanto y camino al baño.
Fijando escenas que nunca pasarán y anhelando su humedad, un sendero seminal se desperdiga en la ajedrez de baldosas, limpio frenético con dentífrico y agua, la luz es tenue, vuelvo a la cama aún sonrojado… duermo bien.
PD
Ando de vacaciones, visitando familia, bikinis, tangas, salsa, sol, ron, piel, en fin, todo ello y más, perturba...
Aqui algunas fotos.
posted by rafico @ 11:38 a. m. Comentarios: 5