Juicios como los tuyos, han concebido batallas,
manos como las tuyas, han lapidado infantes,
con palabras como las que utilizas, se han ofendido a inermes,
con ideas mansas como las tuyas, se han construido bombas,
por radicalismos iguales a los que defiendes, personas han derramado sus entrañas,
dogmas como los que profesas, han justificado infamias.

Persuádete.
Las infamias pocas veces se saben que ocurrieron,
sin las entrañas el hombre que te salvará, no puede vivir,
las armas quitan partes de nuestros frágiles cuerpos,
el inerme puedes ser tu,
niños fuimos todos,
y cualquier lesión perdura.

Por ello y más, cuida siempre de lo que juzgas, haces, dices, piensas y crees, porque en tu cotidianidad estarás creando guerras o aún peor, alimentando alguna.

posted by rafico @ 1:26 p. m. Comentarios: 13